Es la tercera vez que venimos mi pareja y yo a este camping y siempre nos hemos quedado en tienda de campaña. Las parcelas son bastante grandes separadas por árboles lo que da sombra a algunas horas del día. Es un camping muy tranquilo y amplio con unos baños limpios. Tiene varios bungalows y una piscina para adultos y otra para niños ambas muy limpias siempre, una zona de acampada libre, columpios para los niños y una pista para hacer deporte (tenis). Hemos comido en el restaurante del camping y nos ha sorprendido gratamente, un menú no muy extenso pero variado y muy muy rico todo.
Tienen las medidas de seguridad requeridas ahora por el coronavirus. Hay algunos baños, lavabos y duchas que no se pueden utilizar así como algunos fregaderos y las lavadoras. Y hay dispensadores de gel hidro-alcohólico por todo el camping.
Por último, lo mejor del camping el trato de los dueños y los trabajadores. Siempre muy atentos y amables con todo el mundo.
Sin duda repetiremos otra vez.